“La creatividad no consiste en una nueva manera, sino en una nueva visión”
Edith Wharton
¿Sabías que todos podemos ser creativos? Sí, tú también. La creatividad no es un don divino con el que algunos nacen y otros no. La creatividad del ser humano es una capacidad que todos podemos desarrollar y es indispensable, pues esta nos ayuda a diferenciarnos de los demás, nos da individualidad, nadie ve las cosas o situaciones de la misma manera, y eso es bueno, ya que ayuda a desarrollar nuevos conceptos, además de innovar en nuevas áreas.
Independientemente a lo que te dediques, el simple hecho de tener más desarrollada esta habilidad, nos ofrece un amplio panorama de oportunidades. Muchos de los grandes inventos de la historia han nacido a partir de un pequeño chispazo creativo; además una persona que despierta su creatividad tiene mayores herramientas en cuestión de resolución de problemas, no solo hablando en disciplinas artísticas, si no que este pensamiento flexible aporta en cada momento de nuestras vidas.
Posiblemente te consideras una persona poco imaginativa, pero nunca es tarde para ejercitar nuestro pensamiento creativo, a continuación te daremos algunos consejos para que lo apliques a tu día a día.
1.-Observa tus emociones
Trabajar en identificar tus pensamientos y plasmarlos de alguna forma puede ayudar mucho, ya sea en un dibujo, escribir, ponerles forma, color o música, te ayudará a trabajar tu inteligencia emocional lo cual ayudará a regular tus emociones y de esta forma abrir un espacio más fácil al pensamiento creativo.
2.-Acércate a personas, trabaja en grupo
Escucha a las personas que te rodean, las mejores ideas surgen en grupo, comparte tus ideas con los demás, contacta a personas que puedan darte retroalimentación y practica la lluvia de ideas.
3.- ¡Utiliza todos tus recursos!
El proceso creativo no es un trabajo solamente mental, también puedes utilizar el resto de tu cuerpo. Puedes bailar, correr, practicar algún deporte o incluso recurrir a distintos materiales para experimentar. Nuestro cuerpo es el primer medio con el que contamos para expresarnos y para percibir cosas nuevas, es por ello que es nuestro instrumento para ponernos en contacto con nuevas ideas.
4.- Observa y copia algo que te guste:
La inspiración viene de todos lados, busca todo lo que te llame la atención, música, piezas de arte, lugares nuevos o un libro. Tener nuevas referencias ayuda a que nuestra cabeza configure nuevas ideas, que adapte y haga mejoras sobre otras propuestas, recuerda que todo puede traerte ese momento de creatividad.
5.- Aprende a usar la respiración para relajarte.
Aprendiendo a regular tu respiración y concentrarse en ella podrás aclarar tu mente y permitir que las ideas o pensamientos nuevos empiecen a fluir con mayor libertad.
6.-Atrévete a equivocarte
Los adultos generalmente tenemos miedo a equivocarnos, es un temor aprendido, puesto que no sucede lo mismo en los niños, ellos están dispuestos a realizar muchas preguntas y hallar respuestas que no necesariamente son las correctas. Lo importante, es permitirnos cometer errores, sólo así se construirán nuevos aprendizajes.
Como puedes notar, la creatividad no es crear algo de la nada, se trata más de un ejercicio intelectual que ayuda a mezclar referencias, combinar experiencias y a partir de ahí generar nuevas ideas que nos pueden ayudar a expresarnos de una mejor forma; también puede aportar a la resolución de problemas y beneficiar nuestras actividades cotidianas.
En Arte por la Vida buscamos que todas nuestras poblaciones beneficiadas tengan a la mano estos recursos y los utilicen como una herramienta de autoconocimiento y expresión.
Cuéntanos qué actividades realizas para mantenerte siempre creativo.
Itzel Torres Castillo
Psicóloga
Fundación Arte por la Vida A.C.